Si pensamos en el kebab, tenemos una imagen muy clara: un rollo de carne o pollo prensado dando vueltas sobre una barra y cocinándose en un asador vertical. Pero, en realidad, este plato tiene diferencias con el verdadero origen del kebab en Oriente Medio, lugar donde nació esta preparación que ha traspasado fronteras, ¿quieres conocer un poco más de ella?

¿Cuál es el origen del kebab?

El kebab, que en persa significa carne asada, sirvió de comida a reyes de la antigüedad, pero no se trataba del plato que hoy conocemos. En realidad, el origen del kebab está en el sish kebab, una carne preparada en un pincho y asada a la parrilla, que podía estar acompañada o no de verduras.

¿Os suena familiar? Efectivamente, nuestros pinchos morunos, cuyo nombre está precisamente vinculado a su origen árabe, no es otra cosa que el sish kebab de la cocina árabe, una gastronomía de notable influencia en nuestra cocina.

Se dice que el origen del kebab cocinado en una barra metálica, se remonta a una confrontación bélica en la zona, cuando los militares turcos invadieron Anatolia. Durante la contienda, se utilizaban las espadas para ensartar la carne y cocinarla en el fuego, utilizando el pan para suplir la carencia de platos y cubiertos.

Ésta es sólo una de las suposiciones sobre el origen del kebab, ya que se conocen restos de la Grecia Antigua en los que se pueden observar soportes con barras de metal para asar alimentos. Por tanto, no es erróneo pensar que el origen del kebab tiene influencias diferentes.

El kebab que ha conquistado al mundo

Por definición, el origen del kebab es una carne asada, frecuentemente de cordero, pero que podemos encontrar también con ternera, pollo o incluso pescado, en base a los gustos de diferentes países. Debido a la religión musulmana, sólo es posible encontrar un kebab de cerdo en la zona si nos vamos a Grecia, lugar donde se conoce como gyros, en referencia al giro de la carne mientras se cocina.

El kebab que nosotros conocemos es sólo uno de los múltiples kebab que existen y está vinculado al origen del kebab moderno, en concreto el döner kebab, que literalmente significa “carne que da vueltas”. El dürüm kebab, por su parte, significa “carne enrollada o envuelta”, en referencia al pan que envuelve la carne, vegetales y salsas formando un rollo.

Se dice que el origen del kebab moderno, nuestro döner, se remonta al siglo XVIII, cuando los cocineros turcos vieron la utilidad de cocinar la carne en vertical, en lugar de en horizontal, ya que de esta manera la grasa de la carne no caía directamente al fuego.

Esta revolucionaria forma de cocinar, fundamental en el origen del kebab actual, se atribuye a Iskender Efendi, al que hoy se le debe un plato muy tradicional de kebab en Turquía, bautizado con su nombre: Iskender Kebab. Este plato contiene tiras de carne asada con mantequilla, salsa de tomate, yogur y se sirve acompañado de pide, una masa de pan muy fina típica de la cocina otomana.

Pero no sería hasta los años 70 cuando el kebab daría la vuelta al mundo y se abriría en Berlín el primer establecimiento, dando lugar al origen del kebab en Europa.

El origen del Kebab en Europa

Después de la Segunda Guerra Mundial, Alemania recibió una gran oleada de inmigrantes trucos, entre los que se encontraba Kadir Nurman. A él se le atribuye el origen del kebab en Europa, que empezó en las calles de Berlín.

Esas calles fueron las que vieron nacer el kebab moderno, un bocadillo elaborado únicamente con cebolla, carne y pan de pita, que triunfó entre los inmigrantes turcos y entre la población alemana, especialmente en la clase trabajadora.

Desde el origen del Kebab en Alemania hasta día de hoy, este plato se ha convertido en un plato tan típico que probar en las calles germanas como las salchichas, y mucho más consumido que las hamburguesas.

Desde las calles berlinesas, el kebab fue abriéndose camino en Europa, pasando por Austria, Suiza, Francia, Holanda, Dinamarca, Reino Unido y, por supuesto, España, donde apareció primero en las grandes ciudades y poco a poco se fue extendiendo al resto del país.

El origen del kebab y su crecimiento también se pueden ver al otro lado del Atlántico. Este plato se consume de forma muy habitual en Estados Unidos, donde el nombre genérico de kebab hace más referencia al sish kebab, y en los países del Sur de América, como en Argentina, Chile, Colombia o Ecuador, donde es más conocido como shawarma, su nombre árabe.

Más allá de las leyendas urbanas sobre lo que realmente comemos cuando comemos kebab y la desvirtuación de este plato que los expertos sitúan en lo más bajo del fast food, hay que tener presente que el origen del kebab está ligado a una cocina tradicional tan rica como la de los países árabes y es indiscutible que hoy es una de las elaboraciones más populares en todo el mundo.